Se crió, se formó y creció en Luis Guillón. Hizo todas las Divisiones Inferiores, desde pre-novena hasta subir a Primera División, con la camiseta de Banfield puesta. La luchó y sufrió el descenso a la B Nacional en 2013. Buscó dar el salto a Europa, pero las cosas  no salieron como él esperaba. Entonces decidió volver para poner nuevamente a su amado club en la élite del fútbol argentino. De perfil bajo, lejos del "marketing" que hoy abunda en el fútbol argentino, apostando siempre al trabajo y al sacrificio para conseguir los objetivos. Así fue como logró convertirse en uno de los mejores laterales izquierdos del país. Por eso, Jorge Sampaoli lo llevará al Mundial de Rusia 2018. 

Nicolás Tagliafico, a él nos referimos, estará en la máxima cita a nivel de selecciones y será parte del 11 titular que el entrenador pondrá en cancha, cuando Argentina haga su debut contra Islandia el 16 de junio. Y ahí con él, el verde y blanco dirá presente. Porque si tenemos que referirnos al ADN Banfileño, Taglia es un claro portador de ese gen. 

"Por ahora estoy entrenando, como si fuese un día normal, pero a medida que se vaya acercando me voy a dar cuenta que voy a estar jugando algo que cualquier jugador de fútbol quiere lograr, un Mundial", manifestó Nico en una entrevista al sitio oficial de la Asociación del Fútbol Argentino. El defensor disfruta de cada momento como algo único, porque sabe que es algo por lo que luchó desde que fue convocado a la Sub-15. 

Y un claro ejemplo de lo que significó para Banfield, fue el apoyo que le brindaron todos los chicos que hoy se están formando en el fútbol infantil y juvenil del Taladro, que en el entrenamiento abierto que realizó la Selección en Huracán, contó con la presencia de 300 chicos de Banfield que disfrutaron de Lionel Messi, pero además le brindaron su apoyo y cariño a Tagliafico. Ese cariño que el jugador reconoció y agradeció a través de su cuenta en Instagram. 

Y si bien esta oportunidad le llega más que nada por lo último que realizó en Independiente y por lo que viene demostrando en el Ajax de Holanda, sabe que gran parte de su presente se debe a lo que hizo con la camiseta de Banfield. Porque tiene memoria, porque no se olvida de sus comienzos y porque lleva en su sangre el ADN Banfileño.